martes, 30 de marzo de 2010

volver




Sentir, que es un soplo la vida,
que veinte años no es nada,
que febril la mirada
errante en las sombras
te busca y te nombra.
Vivir,
con el alma aferrada
a un dulce recuerdo,
que lloro otra vez.

jueves, 25 de marzo de 2010

soy

a veces soy fragil y otras soy demasiado fuerte; soy un poco caprichosa como todo hijo menor; no soy ni muy alta ni muy baja; soy obstinada, siempre quiero tener la razón; soy adicta al chocolate; soy un poco mentirosa y otro poco envidiosa; soy fanática de cristo; soy extremadamente perfeccionista; soy aficionada a los libros, en especial de Allende, Cortázar y Galeano; soy de los que piensan que todo es bueno en su medida justa; soy intransigente a la injusticia; soy intolerante ante la intolerancia; soy abusivamente empática, tanto que sufro lo que los demás no; soy partidaria del amor sin medidas; no soy adepta a los bolsillos llenos; soy algo carismática y algo alborotada; soy improvisada y organizada a la vez; soy revolucionaria por la paz; soy apolítica; soy idealista; no soy una marioneta fácil de manejar; soy fácil de convencer cuando vienen con buenos argumentos; soy una bolla en el mar; soy una loca linda, una loca bien; soy más allá de que alguien me lo impida; soy feliz la mayor parte del día; no soy para nada consciente de las consecuencias de mis actos; no soy ni un poco orgullosa...
pero por sobre todo soy SIEMPRE yo.

miércoles, 17 de marzo de 2010

gotas

Los días de lluvia me gusta salir al balcón y escuchar cómo gritan las gotas al caer al piso. Así se me van algunas horas, distraída de gota en gota me olvido de que existo y de que el tiempo no me espera. Soy una gota más que salta en las baldozas y se desarma al instante. Me río a carcajadas por las cosquillas que me hacen otras gotas al bailar. Me rozan, me acarician, me consuelan. El viento me despeina, me ensucio, me mojo, me engaño.
Y cuando para la lluvia me siento aturdida, quedan los recuerdos amontonados en un rincón de mi balcón y resuenan algunos gritos pero ya no están las gotas que me hacían compañía.

viernes, 12 de marzo de 2010

sala de esperas

Hoy perdí 3hs. de mi vida, mejor dicho me las robaron, como si fueran milésimas de segundos imperceptibles que no modifican a nadie.
Mientras estaba en la sala de esperas des-esperando a que el dentista se decidiera a sacarme la maldita muela de juicio que intentaba jugar al dominó con el resto de mi dientes, pensaba en el tiempo que perdemos esperando.
Seguramente el ególatra de mi dentista no pensó en las 5 idiotas que lo esperamos 1hs. en su consultorio hasta que por fin llegó, caminando como quien tiene que hacer tiempo porque está llegando temprano a un lugar.
Igual eso fue lo de menos, porque una mente piadosa podría pensar que algo le debe haber pasado para llegar tan tarde. El hecho que más bronca me da es que en su consultorio no existen los turnos, algo tan sencillo como llamar por teléfono y pedir que te reserven un día y horario para no tener que pasarte una tarde eterna esperando que cosa? Una muestra gratis? No! La única recompensa que recibís es una cara completamente demacrada, inflamada y un dolor que se acerca más a un castigo que a una recompensa.
Castigo por haber perdido tantas horas de mi vida? Pero si no era mi intención. Castiguen al maldito dentista que tuvo toda la culpa!
O quizás fue mi culpa por no haberlo prevenido y haberme olvidado un libro que me ocupe el tiempo? Tiempo que por más que intente, no voy a recuperar.

jueves, 11 de marzo de 2010

llenando vacíos

Simplemente quiero inaugurar este espacio, llenarlo con algunas palabras poco importantes para disimular el vacío que hay.
Sólo eso.